El proceso de funcionamiento de este mecanismo tiene tres fases que empiezan cuando el móvil recibe una llamada, un SMS o cualquier otra señal que hayas programado para activar la vibración. Cuando se recibe la señal, ésta cierra un circuito y activa un pequeño motor que está dentro del móvil. El motor vibra hasta que contestas el teléfono o pulsas algún botón para detenerla.
Para que el motor vibre (y no se limite a generar sonido) necesita llevar un peso incorporado en el eje central. El peso se pone deliberadamente desequilibrado para que cuando el móvil suene y el motor se active, el peso se mueva de un lado a otro, moviendo al móvil y generando así la vibración.
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